22 julio 2009

EL FUEGO SIGUE QUEMANDO LA SIERRA

Escucho la tele, oigo la radio, veo el periódico, escucho a los vecinos de la Sierra cómo desgranan su argumento sobre el fuego.
Y yo, que ayer sonreía con sólo pensar en un paseo por la Sierra hoy lloro.
El fuego está quemando la Sierra.
Cuenca arde y no de pasión. El fuego, el fortuito y el provocado se abre paso arrasando el monte.
No me imagino ni cómo quedará. Todo el monte quemado.
Cuando veo, oigo y leo las noticias mi estómago se encoge y las lágrimas saltan solas. Como si por ellas mismas pudiera sofocar tanto incendio.
Esta noche seguirán intentando apagar el fuego. Con esos hombre y mujeres esta noche está mi corazón, mi miedo y mi deseo de que pronto acabe y no tengamos que volver a llorar como en Guadalajara.
Sé que lloraré cuando suba a presentar mis respetos a la Madre Tierra.
Lloro y lloro hoy, cuando oigo que el fuego sigue.


Lloro cuando escucho que un rayo provocó el incendio de Uña y cuando sé que alguien inició en 10 sitios distintos los conocatos de fuego para herir de muerte la Sierra de Poyatos y los alrededores.

Sé que no soluciono nada llorando pero no puedo eviatarlo.

5 comentarios:

  1. Mierda todo.
    Es tramendamente horrible ver las imágenes de la televisión y las fotos de internet.
    Es una mierda.
    Es horrible.
    Hoy arde el 90% de España, y en el extremo superior izquierdo (según miras España en un mapa de Peters, que es dónde hay que verlo) la alerta es por inundaciones...
    No entiendo nada.
    No entiendo que los fenómenos naturales que generan belleza (una tormenta eléctrica es preciosa), acaben porvocando dolor.
    No entiendo cómo alguien puede encender un fuego deseando las consecuencias que a muchos otros nos hacen llorar y sentirnos impotentes viendo como se acaban recuerdos de la infancia y cómo se acaba la posibilidad de compartir con los recién llegados, con viajeros, con turistas y con amigos de cerca y lejos, la maravilla de lo que nos rodeABA, en pasado...
    No lo entiendo.

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  2. No cabe sino dolerse al escuchar la noticia. Y malditos sean quienes quiera que sean.

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  3. Yo tan poco lo entiendo pero... ahí está el monte, se está quemando y no podemos pararlo.

    Ahora los lamentos públicos, pero quiénes despiden a los forestales en invierno e impiden las desbrozas en invierno? ... Los de siempre, los que se suben los sueldos pero permiten los despidos rápidos y los contratos iintermitentes.

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  4. Tu conoces, mas que de sobra, mi forma de pensar, pero en este caso, no solamente ya lo vería bien, sino que como es tanta mi indignación y mi ira, que incluso podría haber aplaudido la decisión de la madre, de este mal nacido, de abortar.

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  5. Bueno "anónimo" seguro te conozco pero... así de perfil no sé quien eres. En cualquier caso bienvenido a esta Posada.

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